viernes, 28 de septiembre de 2012

Proyecto Nº 15 - Miriam Conde

 ¿Un retrato de persona con cabeza de perro o viceversa?

  Los dípticos funcionan, casi siempre, a modo de lenguaje narrativo.  Dos imágenes diferentes, las cuales se solapan formando un todo y que, al igual que una frase, están necesitados de una lectura para reconocer un por qué. 



 Observando con detenimiento las 11 imágenes que conforman el porfolios, vemos luz en las claves de su trabajo, una vez difuminada la apariencia infantil que nos contagia de humor y ambivalencias: Los cuerpos posan desnudos fotografiados sobre un mismo fondo artificiosamente, con flash frontal tal y como delata su sombra, y con unas manos que agarran o sostienen un elemento que hace referencia al retratado. Los perros, al contrario, están fotografiados en la calle, con luz día y en su estado natural.

 El discurso está servido ya que en el porfolios fin de curso de Miriam, llueven preguntas: ¿Nos comportamos como animales? ¿Nos parecemos a ellos? ¿Es la vestimenta lo que nos diferencia? ¿Tenemos cara de perro? ....


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